7/7/7

Se incrustó de aquella manera. Con la destreza de la cerbatana en manos y soplo de indígena.

Zup!

Yo iba en bus camino Bilbao.

Zup!

Se me incrustan números símbolos y palabras.

En avión destino Ibiza 2017 el triangulo amarillo invertido. ZUP! ZUP!

Dardos códigos enigmas como puntas de lanza comienzan a convivir mientras me sueno los moscos hago la comida o pongo la colada.

Códigos que se quedan de okupas y no hay ley que los desaloje.

La única ley que los mueve de sitio es la CONSCIENCIA, ese músculo tan difícil de ubicar relacionado con la comprensión humana.

Zup! Cerbatana dispara. Una y otra vez códigos lanzan y se incrustan.

Llegan sin manual previo. Solo la MEMORIA que despierta muy lenta o de golpe me guía o mas bien me arrastra.

Los guardianes me abren las puertas de los pasillos blancos de los archivos mas puros de hielo cristalino.

Quiero contar esto como quien cuenta un cuento para quitarle la magnitud abrumadora.

Me gustaría convertir en chiste las conexiones divino-mundanas.

Siempre les digo a los dioses que me entrenen primero antes de la cerbatana!!!

Que tengo que sostener la vida con mi disfraz de gallina ponedora haciendo como si nada.

Welcome 7/7/7.

No te voy a engañar. Me tienes contenta pero agotada.

Mi hijo nació un 7.

Otra cerbatana incrustada.

La esencia es un 7.

El vacío es un 7.

7 es una frecuencia código que se incrusta en lo profundo.

Como una espina cuando ignoras.

Como un regalo cuando comprendes.

Como lanza y veloz cuando no alcanzas.

7 es mi DIARIO que puede ser un ensayo o una enciplopedia.

77 es conciencia y trauma.

7 es Alambique, no me cabe duda.

7 es rescatar el Alma.

7 es un código divino flotando entre caldo de borrajas dentro del caldero humano.

7 es el trabajo más íntimo que guardo en La Caja del Tiempo para que alguien lo encuentre y comprenda más adelante aunque yo ya no esté en este plano.

7 es sin duda mi guía y MAPA.

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